GILLETTE










GILLETTE



La angustia acartona mi garganta,
no puedo hablar.
Mis ojos no ven nada, no saben llorar.
Mis pies se anquilosan sin pasos que dar.
Mi cuerpo no quiere virar…
Sigue por el  camino de la porquería
sin saber qué hacer o a quién gritar,
soy transparente, soy materia desnaturalizada…
Soy realidad.
Quisiera hundir una gillette en mis venas,
no a lo horizontal si no a lo vertical…
Para que fluya la sangre de mi organismo
y  la hemorragia no se pueda parar.
Para dejar que mi aliento sucumba al abismo
por no saber quién soy ni a dónde
me encamino.
Sólo sé que no sé nada
que me marcho poco a poco,
a mi destino.
Fracaso tras fracaso, la vida se intuye negra
o blanca, como la muerte eterna…
 Repleta de colores que trasmutan
en la ausencia de sentido,
desfocalizando  el interés que tenía
desnutriendo mi raciocinio.
Después se cerraran mis párpados
y llegará el olvido
Donde estaré,
ausente de tonalidades y colorido.
Después no sentiré placer, dolor,
rencor o miedo a lo desconocido.
Después, no habrá después que valga…
Me fusionaré con el todo
y me convertiré en nada…
La nada sin razón o juicio
¡!
¡! ¡!
¡!
¡!
¡! ¡!
¡!
¡!
¡!



Anna Genovés
23/05/2012